Para sostener una buena microbioma tus mejores aliados serán las verduras, frutas, frutos secos, semillas integrales, aunque tampoco podemos olvidarnos de las grasas saludables; aceite de oliva de calidad, aguacate, aceite de coco...
Es imprescindible incluir una gran variedad y cantidad de estos alimentos, ya que están repletos de fibra y nutrientes que son necesarios para que tu flora intestinal funcione correctamente.
Por otro lado, sería muy positivo para tu organismo que abandonaras hábitos alimenticios que no solo no ayudan a que tu sistema inmune sea más fuerte sino que actúan creando el efecto contrario. Estos alimentos que deberías evitar, junto con el alcohol, son los ultraprocesados, comida rápida, es decir, por lo general aquellos que están plagados de azúcares, sales y conservantes.